En el museo de Croqueta abrieron sus puertas y se dieron cuenta de que faltaba una silla en la sala de artes decorativas, así que nuestros ayudantes de detectives tuvieron que trabajar duro para averiguar lo que había pasado.
Observaron atentamente y encontraron huellas, así que para saber un poco más sobre ellas, se pintaron la palma de la mano y la colocaron apoyada en una cartulina negra. Las analizaron detenidamente fijándose en los distintos tamaños de las manos de cada uno de ellos y de los dedos: hay manos pequeñas, más grandes, dedos gruesos…
Tuvieron que clasificar los elementos a partir de un criterio (color, tamaño o forma) lo que les sirvió para saber como es la silla que estaban buscando y con la ayuda de la directora del museo, averiguaron que las llaves que encontraron eran del almacén.
Después de relacionar cantidades con su expresión gráfica numérica y resolver la suma, descubrieron que los encargados de la limpieza guardaron la silla porque creyeron que no era de la exposición.
Al finalizar, recapitulamos el trabajo realizado y narramos el proceso que llevamos a cabo para llegar hasta ahí, atendiendo al orden cronológico: en primer lugar, había desaparecido el papiro (en el desafío 1); después un cuadro (en el desafío 2) y por último, encontramos la silla desaparecida( desafío 3).
¡Completaron su carnet de detectives¡¡ Enhorabuena¡¡
Y a ti…..¿Qué misterio te ha gustado más? ¿Qué desafío te pareció más interesante?