Ya vamos cogiendo ritmo con las clases de matemáticas, con el EMAT. Uno de los compenentes importantes de nuestro método de matemáticas es que utiliza diversos elementos lúdicos para asentar los aprendizajes, como es el caso de los matijuegos.
A través de una dinámica de juego, con un tablero, unas pocas fichas y unos dados, nos ponemos a repasar el cálculo, las fracciones, las monedas y billetes,… Y la clase se transforma en un pequeño casino, en el que nos tenemos que poner a pensar y razonar, al ritmo de los contenidos de la clase de matemáticas.
Una experiencia interesante que hace de las clases de matemáticas un campo de juego lleno de aventuras. ¿Y quién no se apunta a una clase así…?